La reactivación de los vuelos nacionales e internacionales, así como del sector turístico nacional, se ha convertido en una novela por entregas. Reuniones, propuestas, promesas, revisión, proyecciones. Todo depende de las altas esferas del régimen de Nicolás Maduro.

“La última palabra la tiene el Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC) y otras instancias gubernamentales, hasta ahora no es oficial la reapertura de los vuelos nacionales o internacionales, regulares o no regulares”. Así  explicó para El Diario Nicola Furnari, presidente de la Asociación Venezolana de Agencias de Viajes y Turismo (Avavit).

Furnari considera que “el turismo es muy transversal y funciona de manera engranada. Si no vamos todos en la misma dirección, no va a funcionar la apertura del sector, la cual debe contar con el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) operativo”.

—¿Cuáles son las prioridades de los propietarios de las agencias de viajes?

—Que nos dejen trabajar en el próximo esquema del 7+7. Desde el 16 de marzo de este año no se vende un boleto o se concreta un negocio. Ya que no añadimos riesgo a nuestros clientes, pues las ventas son por la vía digital. También aspiramos a que nos dejen promocionar y vender a futuro, para oxigenar el sector. Incluso podemos iniciar operaciones sin que reactiven los vuelos y hacer ventas para Carnaval, Semana Santa o vacaciones de 2021. Todo con el pleno conocimiento del cliente de que hay un riesgo de que no se lleven a cabo sobre todo en fechas cercanas. 

—¿Cuántos empleos generan las agencias de viajes de forma directa o indirecta?

—Las agencias ofrecen 15.000 empleos directos y más de 50.000 indirectos. Todo el sistema turístico tiene unos 300.000 puestos directos y más de 1.000.000 indirectos. No podemos seguir sin operaciones, solo necesitamos los permisos para laborar. Si llegamos cerrados a diciembre, habrá un número importante de empresas que no podrán seguir en el mercado.

—¿Qué otras solicitudes hace el sector turismo al régimen de Maduro?

—No estamos pidiendo nada irracional que afecte la salud de nuestros pasajeros o de la población. Un trabajo ordenado y seguro permitiría la reactivación. Ya está demostrado que a pesar de que el inicio de la transmisión del covid-19 en Venezuela fue por migración, el transporte aéreo es mucho más seguro que ir al automercado o la farmacia.

—¿Quién comercializa los vuelos humanitarios que permite el régimen de Maduro?

—Recientemente les solicité a las aerolíneas que hacen vuelos humanitarios que fueran más inclusivas al permitir que más agencias participaran en la comercialización de estos, que son solicitados directamente por las sedes diplomáticas. Estas eligen cuáles son los canales de distribución de los boletos. Los vuelos son escasos y son muy pocas las empresas las que participan en la colocación de los pasajes.

Nicola Furnari aseguró que en Venezuela hay talento y experiencia que puedan manejar el tema de la reactivación en trabajo conjunto con el régimen, “los aeropuertos están siendo adecuados a los nuevos parámetros de seguridad así que esperamos que la reactivación se de pronto”.

La propuesta de Avior

Juan Bracamonte, presidente ejecutivo de la aerolínea Avior, confirmó en una entrevista radial a Unión Radio que está trabajando en una propuesta de apertura de vuelos no regulares para el mes de noviembre.

Desde este 5 de octubre, Bracamonte mantendrá reuniones con las autoridades aeronáuticas del país para planificar cómo serían los procesos de los vuelos no regulares.

Cuáles serán los pasos de bioseguridad para abordar los vuelos, la capacidad de cada uno y demás detalles son temas que se mantienen en discusión.

De hacerse oficial, los vuelos no regulares funcionarían entre el mes de noviembre y el 15 de diciembre, que es la fecha tentativa para que se reinicien los vuelos regulares nacionales e internacionales.

Vivir de los ahorros

José Luis Pino, presidente de la Asociación Venezolana de Mayoristas y Empresas de Representaciones Turísticas (Avemarep), coincide con Furnari.

Informó  que “estos siete meses de cierre han sido duros para nosotros, pues estamos resistiendo con nuestros propios recursos. No hemos dejado de pagar al personal de las empresas de turismo, así como impuestos a entidades municipales y nacionales, alquiler de locales y estamos invirtiendo para acondicionar nuestras oficinas a los esquemas de bioseguridad. No podemos seguir cerrados. Hay quien ha diversificado el negocio y ha cambiado la venta de boletos aéreos por la de aceite de oliva, por ejemplo, pero esto no puede ser eterno; somos profesionales muy especializados y queremos seguir en el segmento”.Se mantiene la prohibición de vuelos El 12 de septiembre el INAC extendió la medida de cierre de vuelos en todo el país hasta el 12 de octubre

El dirigente del gremio señaló que “todo el sector turístico: hoteles, agencias de viajes, líneas aéreas, transportistas estamos trabajando para garantizar el reinicio seguro de operaciones. De parte del gobierno queda adecuar los aeropuertos a las normas de bioseguridad. Entiendo que el nacional de Maiquetía y el de Porlamar son los que más adelantados están en cuanto a la adecuación de sus espacios. El gobierno es el que debe definir qué abre primero y yo aspiro que para fines de noviembre haya vuelos nacionales. Los internacionales quizá para fines de diciembre o de enero de 2021”.

El empresario comentó que los gremios del turismo se reúnen periódicamente con funcionarios del INAC y del ministerio de Turismo. “Nos han dicho que están a punto de reabrir y creo que nos tienen que avisar con suficiente tiempo para finiquitar procesos”.

José Luis Pino citó el ejemplo de empresarios de la isla de Margarita, “han hecho un enorme esfuerzo con sus propios recursos para adecuar las instalaciones turísticas de la isla. Son un gran ejemplo de trabajo conjunto y profesional”, finalizó.

Los empresarios del sector turismo aseguraron a este medio digital que en las próximas reuniones que habrá con representantes del INAC y el Ministerio de Turismo seguirán presentando propuestas sobre cómo hacer más segura la operación. No solo de los vuelos aéreos, sino del trabajo en agencias de viajes, locales comerciales y hoteles.