Las películas en las que el protagonista se encariña con una extraña criatura ya, prácticamente, conforman una premisa fija dentro de lo que se crea para los géneros de aventura, fantasía y ciencia ficción. Quizá uno de los ejemplos más representativos es el de “E.T, el extraterrestre”, la joya de Steven Spielberg que hizo en los ochenta que toda la audiencia se apegara a un alienígena de buen corazón. Más ejemplos los encontramos en sagas como “Mascota Jurásica”, en la que niños se topan de manera fortuita con una especie milenaria a la que protegen como si se tratara de un animal doméstico con el que generan un gran vínculo afectivo. ¿Qué tienen en común este tipo de historias y personajes?.
Que nos hablan de no tenerle miedo al que es diferente a nosotros, del valor de la amistad y de la valentía de salir de cierta zona de confort para convertirse en héroe. Y de eso habla también “La leyenda de Ochi”, ópera prima de Isaiah Saxon que Mundo D Película trae a la cartelera venezolana a partir del jueves 15 de mayo.
“La leyenda de Ochi” narra la vida de Yuri (la joven actriz alemana Helena Zengel), quien crece con pánico a ciertos seres solitarios del bosque, en la exuberante y montañosa isla ficticia de Carpatia, que tiene un natural clima “misterioso” dada su abundante neblina. Esas criaturas son, justamente, los Ochi, consideradas peligrosas para todos los humanos. Pero Yuri cambia su perspectiva cuando se topa con un Ochi bebé en pleno bosque y decide ayudarlo a reencontrarse con su familia, especialmente con su mamá.
de los conflictos principales de la protagonista es que su padre, Maxim (Willem Dafoe) es precisamente el líder de cacería de los Ochis en el bosque, por considerarlas especies siniestras y por su perturbador tono agudo. Emily Watson es Yasha, la madre de Yuri, que el padre procura no mencionar desde que esta los abandonó. Con este contexto se desarrolla una aventura llena de mucha acción, comedia y también mucha ternura por ese ser que genera un vínculo afectivo con la heroína de turno (y con la audiencia).
A diferencia de lo que muchos espectadores puedan pensar, el personaje de Ochi no es generado por un efecto computarizado, es un títere manejado por un equipo de titiriteros que incluso tomó un taller de interpretación de marionetas en el Reino Unido para llevar a cabo el rodaje. Esto en equipo con el diseñador de producción, Jason Kisvarday y el director de fotografía, Evan Prosofsky, según lo explicado por el director Isaiah Saxon, quien debuta como realizador de largometrajes con esta película.
Anteriormente, Saxon ha estado encargado de videos musicales de artistas como Björk y Panda Bear, fundador de la banda Animal Collective. El rodaje fue llevado a cabo en los bosques de Rumanía, en una zona que, antes de que fuese iniciada la filmación, fue devastada por los osos, quienes -según lo que indican las notas de producción en el sitio Imdb.com- destrozaron varias cabañas. En el mismo sitio web Imdb.com en el perfil de Isaiah Saxon puede verse un interesante video tras cámaras de esta producción en el que todo el equipo trabajó, aparentemente, en armonía con la naturaleza y procurando que el títere que le da el nombre a la historia tuviese los planos correctos.
La crítica internacional ha aplaudido el resultado de “La leyenda de Ochi”, por su cinematografía, con una dirección de fotografía que aprovechó el paisaje natural rumano, por su originalidad y su relato cautivador. Todo eso suma cifras como 90 sobre 100 puntos en la revista Variety y 80 sobre 100 en The Hollywood Reporter, entre otros medios que aclaman el filme. Eso sin mencionar la buena respuesta que le ha dado el público.
Si deseas más información, clips o fotogramas de “La Leyenda de Ochi” visita en Instagram @mundodpelicula.
Nota de prensa